El estreñimiento es una alteración digestiva muy común que puede repercutir en el bienestar diario. Para prevenirlo o mejorar sus síntomas, lo más recomendable es empezar a incorporar rutinas saludables, tal y como puedes leer aquí. Sin embargo, en algunos casos puede ser necesario recurrir a los laxantes, que ayudan a facilitar la evacuación. En este artículo veremos qué son, cuándo usarlos y qué tipos existen. Además, recomendamos opciones naturales como Fuca, ideales para el cuidado del tránsito intestinal.
¿Qué son los laxantes?
Los laxantes son todas aquellas sustancias que ayudan a expulsar las heces con mayor facilidad.
¿En qué casos hay que usar laxantes?
Los laxantes se usan en los casos en que es indicado ablandar las heces y evitar un esfuerzo al expulsarlas.
En cualquier caso, cuando se sufra de estreñimiento, primero hay que tratar de cambiar los hábitos, la alimentación… Si así no se logra cierta mejoría, su médico puede que considere indicado el uso de laxantes.
Los laxantes se usan habitualmente cuando un paciente presenta lesiones anales o hemorroides. Su fin es evitar el aumento de la circulación en el ano, ya que puede provocar una mayor inflamación. Además, con los laxantes, se disminuye el trabajo que hay que realizar para expulsar las heces duras.
Tras operaciones en el área abdominal o de los órganos reproductivos, así como en pacientes con una presión arterial elevada, debe reducirse la presión que se produce en el abdomen al defecar. En estos casos, el uso de laxantes está completamente justificado. Por supuesto, su médico le indicará cuán es el tratamiento más adecuado.
Tipos de laxantes
A continuación, presentamos un listado detallado de los principales grupos de laxantes, su mecanismo de acción, sus indicaciones… incluso de sus ventajas y desventajas. Para que, en función de su caso, entienda todos los pros y contras de cada opción de tratamiento.
Por supuesto, su médico debe ser el que, en última instancia, le indique qué tratamiento es el más adecuado par su caso en particular.
- Laxantes estimulantes: estimulan directamente la motilidad del intestino para favorecer la evacuación. Su uso debe ser puntual, en caso de estreñimiento agudo.
- Laxantes osmóticos: atraen agua hacia el intestino para ablandar las heces y facilitar su expulsión. Son útiles en casos de estreñimiento ocasional, pero requieren una adecuada hidratación.
- Laxantes lubricantes: forman una película aceitosa sobre las heces y la mucosa intestinal, lo que reduce la fricción al defecar. Están indicados en situaciones concretas y bajo supervisión médica.
- Laxantes naturales: proceden de alimentos ricos en fibra o extractos vegetales que estimulan el tránsito de manera suave. Son una alternativa respetuosa y bien tolerada para el uso regular.
Los laxantes pueden ser un apoyo eficaz frente al estreñimiento cuando los cambios en los hábitos no resultan suficientes, siempre con el consejo de un profesional sanitario. La elección dependerá de la causa y la situación de cada persona. En este sentido, opciones naturales como Fuca son eficaces para mantener el bienestar digestivo.